El disco duro (HDD), está limitado a la hora de leer, escribir y buscar datos por la velocidad en la que gira el plato y se desplaza la aguja. Esto provoca que en la mayoría de los casos tu ordenador funcione con lentitud. Los sistemas operativos, programas y navegadores de hoy en día, precisan de una tecnología superior, ya que cada vez son más potentes y es mayor la cantidad de datos que tu disco duro debe ser capaz de analizar por cada segundo.